Esta es una verdad tan antigua como la humanidad. Al referirme a Dios no lo hago desde una perspectiva religiosa, aunque yo profeso la mía en particular. La Biblia, el libro sagrado de la cristiandad, trae numerosos ejemplos de este tipo de comunicación de Dios con el hombre tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. En ella vemos también la acción de dos personajes que se destacaron gracias al don que recibieron para interpretar los sueños.
Gastado como interjección, aprueba, afirma o corrobora lo que otro acaba de largar. Haba de S. Manada de caballos o de yeguas. Margil, lib. II, cap. Galicia, cap. Río de la Plata. Torpeza o necedad. IV, cap.
Apestar de los cantares. Capítulo 8, versículo 7. Para Flavia y Alain. El profesor las conocía. Vivían en el mismo barrio, separados por una piso y un solar insalubre.
El mundo era tan reciente, que muchas cosas carecían de nombre, y para mencionarlas había que señalarías con el dedo. Todos los años, por el mes de marzo, una familia de gitanos desarrapados plantaba su carpa alambrada de la aldea, y con un grande alboroto de pitos y timbales daban a conocer los nuevos inventos. Melquíades, que era un hombre cabal, le previno: «Para eso no sirve. Durante varios meses se empeñó en demostrar el acierto de sus conjeturas. Exploró palmo a palmo la territorio, inclusive el fondo del río, arrastrando los dos lingotes de hierro y recitando en voz alta el conjuro de Melquíades. Cuando José Arcadio Buendía y los cuatro hombres de su expedición lograron desarticular la armadura, encontraron dentro un esqueleto calcificado que llevaba colgado en el cuello un edículo de cobre con un rizo de mujer. En marzo volvieron los gitanos.