Conclusión El origen del miedo al rechazo Durante gran parte de mi vida, esto es lo que me sucedía cada vez que salía y veía alguien que me gustaba: En la mayoría de las ocasiones, tenía tanto miedo a que me rechazara que ni siquiera intentaba hablar con ella. Y así regresaba a casa noche tras noche. Si me atrevía a presentarme, al cabo de 5 minutos ya no sabía que decir. Entonces ella se excusaba y decía que tenía que marchar.
Cómo ligar con una chica siendo asistenta Soy mujer y me he acaramelado de otra mujer Es probable que este sentimiento te surja por primera vez y no sepas exactamente cómo actuar. En primer lugar, es importante tener en cuenta que la espectáculo hacia una persona del mismo amor no es una respuesta anormal o preocupante por la que debamos sentirnos mal. Por lo tanto, si te has enamorado de otra mujer y eres mujer, no tienes por qué sentirte mal o culpable por tus emociones. No obstante, vamos a darte unas pequeñas pautas para saber qué hacer en dos casos muy distintos: 1. Estoy casada pero me gustan las mujeres En este caso, es importante que analices tus sentimientos respecto a tu pareja y decidas qué hacer para no hacerte daño, tampoco a ti ni a él. Descubrir que te gustan las mujeres puede ser un punto de inflexión en tu vida, sin embargo, pueden gustarte a su vez los hombres.