Solteros y casados: Juntos en la fe Solteros y casados: Juntos en la fe Por Kathleen Lubeck Peterson Juan Fortunato, de Buenos Aires, Argentina, enseña una clase de inglés a los miembros de su barrio que tienen interés en aprender esa lengua. Susan Buckles se instaló en Hilton Head, Carolina del Sur, y acudió a la biblioteca local de historia familiar. La bibliotecaria le preguntó a Susan si le gustaría servir allí como voluntaria, y ella aceptó. En realidad, no importa. Lo que sí importa es la dicha que se recibe cuando el hermanamiento y el amor de Cristo van de la mano. El presidente Gordon B. Hinckley tiene presentes a todos los santos. Todos podemos sentir el amor puro de Cristo, independientemente de nuestra edad, estado civil, riqueza, pobreza o incluso la celebridad.
Puede llevar cuando menos te lo esperas y poner tu vida patas para arriba. Pero también es importante cuando una persona toma un compromiso con otra y decide honrarlo o no. La mujer que diga que jamás ha coqueteado con un hombre casado creo que estaría mintiendo. Es importante entender lo que pasa por la mente de un hombre casado cuando es infiel para poder ver la situación objetivamente. Pero tampoco puedes ponerte en el lugar de damisela en peligro, ni de víctima.
Problemas con tu pareja. Puede ser que de un tiempo a la día, los problemas que tenías con tu pareja hayan aumentado o que jamás los habían tenido y de repente hayan aparecido y no saben como reaccionar ante ellos. Por lo que sabes que cada vez que llegas a tu casa van a debutar las discusiones y vives sumamente estresado. Esto puede probocar que de forma consciente o inconsciente te fijes en otras personas ya que el hacerlo te hace enfocar tu mente en otra cosa y olvidarte un algo de los problemas que tienes con tu mujer. Tal vez tu galán y tu han llegado a un punto de su relación en el que se encuentran estancados, hacen todo el tiempo lo mismo y no se atreven a salir de la rutina e innovarse. Otra de las razones por las cuales no te puedes sacar de la cabeza a otra mujer, es debido a levante efecto psicológico. Disminución del deseo venéreo hacia tu mujer.